Los sueños suelen terminar porque los cambiamos por otros o porque se cumplen. El final de este sueño me ha llenado tanto que se han creado otros muchos sueños en su lugar, y otros que ya existían se han reforzado. Porque si he aprendido una cosa a lo largo de este viaje, con toda la gente maravillosa y variopinta con la que nos hemos topado, ha sido que si de verdad quieres algo se va a hacer realidad. Los sueños no terminan en el mundo onírico ni en la imaginación.
Para mí ha sido una lección valiosísima que no pienso olvidar.
Para mí ha sido una lección valiosísima que no pienso olvidar.
Sábado, llegada a Upton Farm, nuestra cama-base en Cornualles. Llegada aproximada 1:35 AM. Por el camino: No me siento - el Cullowtown. Se ha dormido - mi Cullowton. Ya no siento - el Cullowton. Se ha dormido, se ha dormido - mi Cullowton.
Dos días después el hímno se traducía al inglés. El año que viene está previsto que salga el single.
A lo largo de la semana vivimos momentos inolvidables al lado de gente de la que había oído hablar, desde bardos, druidas, brujas, hippyflowerpowers majísimos, niñas-hada, ex-actores pornos que son un primor... En fin, un no parar de conocer y ver gente.
Quedan en el tintero muchas excursiones por allí.
...Y cuántas sonrisas y cansancio y lágrimas de risa... :)
¡En breves, unas pocas fotos!